La Bluewave Alliance, alianza de empresas con propósito, emprendedores sociales y la comunidad científica, impulsada por el laboratorio ISDIN, ha presentado hoy su proyecto estrella SeaSpore para regenerar el fondo marino de las principales capitales del mediterráneo combinando tecnología y arte. La Bluewave Alliance tiene como objetivo proteger, rejuvenecer y recuperar la biodiversidad del Mediterráneo, el mar más contaminado del mundo, a través de proyectos innovadores y de impacto.

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Barcelona podría ser la primera ciudad en acoger el proyecto SeaSpore, una iniciativa en la que colaborarán diferentes artistas nacionales e internacionales para ampliar las escolleras con obras de arte que se convertirán en generadoras de vida marina. El proyecto se ha presentado en el marco del Mobile World Congress Barcelona en el stand de la Bluewave Alliance donde se puede ver una recreación a escala de una de estas obras de arte. “El Mediterráneo es el mar que nos vio nacer y que nos ha inspirado con su belleza, riqueza de especies y su privilegiado ecosistema, único en el mundo. Hoy está amenazado. Es por ello que en ISDIN, a través de la Bluewave Alliance y el proyecto SeaSpore nos proponemos crear un movimiento para conocer, amar y proteger el mar y así impulsar su regeneración para que las futuras generaciones puedan disfrutar de un Mediterráneo saludable y bonito” explica Juan Naya, CEO de ISDIN, compañía impulsora de la Bluewave Alliance.

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El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, se ha mostrado interesado en la iniciativa para que Barcelona sea pionera en la regeneración del Mediterráneo a través del arte con el proyecto SeaSpore. “El Mediterráneo es uno de los grandes tesoros de Barcelona y queremos que sea un motor de futuro, por ello debemos preservar la biodiversidad y la vida marina que alberga. Ya lo hemos hecho con las obras de reforma del Port Olímpic, que ha aprovechado el refuerzo del Dique de Abrigo para crear un arrecife de bioregeneración. El proyecto SeaSpore es una gran iniciativa que unirá artistas, científicos y la iniciativa público-privada para crear una experiencia de concienciación, protección y regeneración del mar única en el mundo”.

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Cada obra de arte elaborada con carbonato cálcico será una escultura de 3x3x3 metros que se sumergirán en el fondo marino y a través de tecnología punta se podrá monitorizar las métricas biológicas y de evolución de la biodiversidad en tiempo real. El objetivo del proyecto es crear conciencia entre los ciudadanos para preservar los mares y océanos, por ello se instalará una exposición de réplicas de las esculturas en la superficie y los visitantes podrán ver, escaneándolas con una app, como generan vida en el fondo del mar. De esta forma se creará un atractivo turístico y una zona de interés para que tanto barceloneses como visitantes se acerquen al litoral y al mar para apreciar la belleza del arte y la naturaleza.